A continuación, un editorial que refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.
Se está agotando el tiempo para prevenir los efectos a largo plazo del cambio climático global.
El Acuerdo de París de 2015 fue un comienzo en la dirección correcta, al exhortar a sus casi 200 países signatarios a limitar el calentamiento global, muy por debajo de dos grados Celsius, en comparación con los niveles preindustriales, limitando sus emisiones de carbono.
Apenas asumió el cargo, el presidente Biden inmediatamente tomó medidas para que Estados Unidos se reincorporara al Acuerdo de París. Pero “París no puede hacer el trabajo por sí solo”, dijo el Enviado Presidencial Especial para el Clima, John Kerry.
“Y no estamos haciendo todo lo que nos propusimos hacer en París. Así que, este es el
momento en el que los países, los gobiernos de sentido común, las personas se unan y hagan el trabajo”.
A principios de marzo, el Enviado Presidencial Especial Kerry, representantes de la Unión Europea y del Reino Unido se reunieron, en Londres, Bruselas y París, para renovar su alianza y trabajar en estrechamente para hacer frente a la crisis climática. Las tres partes se comprometieron a lograr cero emisiones netas de gases de efecto invernadero, a más tardar para 2050, y resolvieron ayudar a los más vulnerables del mundo a adaptarse y responder a los impactos climáticos.
“No hay mejores socios que nuestros amigos aquí en Europa y en la UE”, dijo el Enviado Presidencial Especial Kerry.
“Es importante para nosotros alinearnos ahora porque ningún país, por sí solo, puede resolver esta crisis. Se necesitarán todos los países y será más que gobiernos. Se necesitará a la sociedad civil de nuestros estados, comunidades, nuestras naciones, y se necesitará al sector privado, que es lo más importante”.
Hacerle frente al cambio climático es una propuesta costosa, dijo el Enviado Presidencial Especial Kerry, pero invertir en una economía limpia crea empleos ahora y ahorra dinero a los
países. “Cada uno de los análisis económicos lo deja claro. Es más caro para nuestros ciudadanos no responder”. Al mismo tiempo, “también es un momento de la mayor oportunidad que hemos tenido desde quizás la revolución industrial, para construir mejor”.
“Para renovarnos en nuestras economías, que es un momento económico extraordinario, donde habrá nuevos productos, nuevas tecnologías, ya sea la captura de carbono o almacenamiento de baterías o combustible de hidrógeno, dominan la lista. Esas son las soluciones a la crisis que enfrentamos”.
“El sentido común dicta que este es el momento”, dijo el Enviado Presidencial Especial Kerry. “Podemos hacerlo. Disponemos de muchas de las tecnologías en la actualidad y muchos, muchos países están trabajando, las empresas están trabajando muy duro para desarrollar las tecnologías que sabemos que necesitamos. Esto puede hacerse”.
Fue un editorial que refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.