El siguiente editorial refleja opiniones del gobierno de Estados Unidos.
Recientemente, el Secretario de Estado Antony Blinken visitó Haití para reunirse con líderes del país y promover el objetivo de un Haití seguro y democrático.
Hace varios meses, la situación de seguridad en Haití, que lleva años siendo frágil, se derrumbó cuando pandillas violentas tomaron grandes partes de la capital y amenazaron con expandirse aún más. Más de 2.500 personas murieron y decenas de miles fueron desplazadas. Edificios gubernamentales, como las comisarías de policía, fueron atacados; las prisiones, asaltadas; el aeropuerto principal cerró. El primer ministro, eventualmente, renunció.
El Secretario Blinken señaló que, desde marzo, se han registrado avances políticos positivos en Haití.
“Los haitianos crearon un Consejo Presidencial de Transición. Hay un gobierno con un primer ministro interino, un gabinete, y las instituciones avanzan para hacer el trabajo de cumplir con lo prometido al pueblo haitiano. Estados Unidos aprecia que los líderes de Haití hayan dejado a un lado sus diferencias y trabajen juntos para poner al país en el camino hacia elecciones libres y justas. Esperamos que el CPT nombre rápidamente un Consejo Electoral Provisional para organizar esas elecciones. Ese es el siguiente paso crítico”.
A medida que avanza el proceso político, también lo hacen los esfuerzos para proporcionar una base de seguridad sólida, dijo el Secretario Blinken.
“La Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad, autorizada por Naciones Unidas el año pasado, ha avanzado. En los últimos meses, más de 380 efectivos kenianos han llegado para apoyar a la Policía Nacional de Haití como parte de esta misión, y se prevé que lleguen más. En las últimas semanas, la Misión, junto a la Policía Nacional de Haití, ha aumentado las operaciones conjuntas, llevando la lucha a las pandillas y transmitiendo un mensaje contundente: el pueblo haitiano, no las pandillas haitianas, escribirá el futuro del país”.
Estados Unidos sigue siendo el mayor donante financiero para Haití, incluido el MSS. El Secretario Blinken elogió a otros países que han dado un paso adelante para ayudar a Haití. Indispensablemente, Kenia. También, Canadá, Jamaica y El Salvador.
“Pero en este momento crítico”, dijo, “necesitamos más personal para sostener y llevar a cabo los objetivos de esta misión”. En la reunión de la Asamblea General de la ONU, Estados Unidos convocará una reunión ministerial para alentar mayores contribuciones y ayudar a sostener el progreso.
“Hemos visto un buen comienzo para hacer avanzar en Haití, pero aún queda mucho por hacer”, dijo el Secretario Blinken. “Estamos determinados a ayudar al pueblo haitiano a escribir el futuro que merece”.
Fue un editorial que refleja opiniones del gobierno de Estados Unidos.