A continuación, un editorial que refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.
La Administración Biden-Harris ha establecido una estrategia ambiciosa y de múltiples frentes para abordar las causas fundamentales de la migración irregular o el movimiento transfronterizo de personas fuera de las leyes, reglamentos o acuerdos internacionales que rigen el cruce de fronteras internacionales.
Esta estrategia implica trabajar con los gobiernos centroamericanos y otros socios, la sociedad civil, el sector privado y las organizaciones internacionales para encarar las condiciones en la región que generan que muchos huyan de sus países hacia Estados Unidos.
Durante una reunión bilateral virtual el 26 de abril con el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei, la vicepresidenta Kamala Harris dijo que una serie de problemas de larga data a menudo se denominan causas fundamentales de la migración irregular.
“Estamos viendo el tema de la pobreza y por tanto, la falta de oportunidades económicas, las condiciones climáticas extremas y la falta de adaptación climática, así como la corrupción y la falta de buen gobierno; y violencia contra las mujeres, los pueblos indígenas, las personas LGBTQ y los afrodescendientes”.
“Estados Unidos tiene previsto incrementar el alivio a la región; fortalecer nuestra cooperación para gestionar la migración de una manera eficaz, segura y humana”, dijo la vicepresidenta Harris.
“Además de nuestro trabajo bilateral y nuestros esfuerzos multilaterales, Estados
Unidos está construyendo una estrategia integral con instituciones internacionales, con aliados en todo el mundo, con fundaciones aquí en Estados Unidos y el sector privado, así como organizaciones comunitarias”.
La vicepresidenta Harris anunció después de la reunión virtual que Estados Unidos proporcionará $ 310 millones de dólares adicionales para ayuda humanitaria e inseguridad alimenticia en la región para satisfacer necesidades urgentes e inmediatas.
Esto incluye asistencia humanitaria para El Salvador, Guatemala, Honduras y la región. La ayuda humanitaria proporciona asistencia alimenticia de emergencia, refugio, atención médica, detección de desnutrición, suministros para el lavado de manos y la higiene, protección, programas de recuperación económica y capacitación en resiliencia para futuros desastres y crisis climáticas.
“Parte del espíritu detrás de nuestro trabajo es que, por supuesto, el Hemisferio Occidental es nuestro hogar colectivo y las personas que lo integran, y nuestros vecinos están cerca y, por lo tanto, tenemos la responsabilidad de participar”, dijo la vicepresidenta Harris.
“Creo que el trabajo, para tener éxito, requerirá la participación de todos. Y creo que también se requerirá voluntad política y trabajo arduo para lograr nuestras metas. Pero estoy segura de que podemos avanzar y crear un sentido de esperanza para el futuro”.
Fue un editorial que refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.