A continuación, un editorial que refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.
Estados Unidos acoge los esfuerzos iniciales de los líderes políticos de Haití para unirse en la selección de un Primer Ministro y un gabinete que tracen un camino hacia adelante a raíz del atroz asesinato del presidente Jovenel Moïse.
Moïse, de 53 años, fue asesinado en su residencia privada en las colinas de Puerto Príncipe el 7 de julio, mientras que su esposa, Martine Moïse, resultó gravemente herida.
Claude Joseph, quien era el primer ministro en funciones de Haití en el momento del asesinato del presidente Moïse, acordó hacerse a un lado y abrir camino a un gobierno inclusivo cuyas principales tareas serán restaurar la seguridad y establecer las condiciones necesarias para celebrar elecciones libres y justas.
El gobierno estará dirigido por el Dr. Ariel Henry, quien fue designado por Moïse para reemplazar a Joseph justo un día antes de que el presidente haitiano fuera asesinado.
El secretario de Estado Antony Blinken calificó la formación del nuevo gobierno de Haití como un "paso positivo y necesario para responder a las necesidades del pueblo haitiano y comenzar a restaurar las instituciones democráticas de Haití".
En el momento de la muerte de Moïse, Haití ya se enfrentaba a una crisis política y constitucional cada vez más profunda con un parlamento disfuncional, una Corte Suprema diezmada, una falta de alcaldes electos y unos pocos legisladores.
La nación también ha enfrentado un aumento de la violencia de las pandillas y secuestros.
Estados Unidos, junto a la comunidad internacional, exhorta al primer ministro Henry y a otros líderes políticos a fortalecer el compromiso con la sociedad civil política, económica y vibrante de Haití para promover un diálogo amplio e inclusivo que responda a las necesidades del pueblo haitiano y siente las bases. para la estabilidad y la prosperidad a largo plazo.
“Seguimos comprometidos a apoyar la investigación del gobierno haitiano sobre el asesinato de Jovenel Moïse, expandir los esfuerzos de vacunación contra COVID-19, trabajar con la Policía Nacional de Haití para promover la seguridad y el estado de derecho, y coordinar con la comunidad internacional para establecer las condiciones necesarias para que los haitianos voten tan pronto como sea posible”, dijo el secretario Blinken.
Estados Unidos llama a todos los haitianos a que trabajen juntos para mantener la paz y continuará apoyando al pueblo haitiano en su lucha por construir un país estable, próspero y democrático.
Fue un editorial que refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.