A continuación, un editorial que refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.
El Departamento de Estado tomó medidas para restringir visas a ocho funcionarios cubanos que estuvieron involucrados en intentos de negar al pueblo cubano sus derechos fundamentales a través de intimidación, encarcelamiento injusto y sentencias severas.
Cientos de manifestantes en toda Cuba siguen encarcelados después de las protestas del 11 de julio, algunos con condiciones de salud cada vez peores y sin acceso a alimentos, medicinas, llamadas o visitas adecuadas de sus seres queridos o abogados.
El Departamento implementó estas acciones específicas de conformidad con la Proclamación Presidencial 5377, la cual suspende la entrada a Estados Unidos de funcionarios y empleados no-inmigrantes del gobierno cubano y el Partido Comunista. Estos ocho individuos incluyen funcionarios cubanos relacionados con la detención, sentencia y encarcelamiento de manifestantes pacíficos del 11 de julio.
Para quienes participaron en las protestas del 11 de julio, el gobierno cubano impuso penas severas, con sentencias de hasta 30 años de prisión. Las autoridades han detenido repetidamente a Luis Manuel Otero Alcántara, Maykel Osorbo, y José Daniel Ferrer, quienes se encuentran actualmente en prisión simplemente por dar voz al deseo de libertad del pueblo cubano.
A mediados de noviembre, el régimen cubano envió fuerzas de seguridad y una turba patrocinada por el gobierno para intimidar al dramaturgo Yunior García, quien participó en las negociaciones de 2020 con el Ministerio de Cultura y organizó llamados para otra protesta pacífica. Desde entonces viajó con su familia a España.
Los cubanos han pedido repetidamente al gobierno que escuche sus llamados a respetar los derechos humanos, las libertades de expresión y reunión, y la democracia. “En todas las ocasiones, el régimen desperdició la oportunidad para el diálogo, redoblando su apuesta por una ideología en bancarrota y un sistema económico fallido que no puede satisfacer las necesidades básicas de los cubanos”, dijo el secretario de Estado Antony Blinken en una declaración previa.
Las más recientes acciones de visa refuerzan el compromiso de Estados Unidos de apoyar al pueblo cubano y promover la rendición de cuentas de los funcionarios cubanos que permiten la afrenta del régimen a la democracia y los derechos humanos.
Estas acciones magnifican el impacto de cuatro sanciones del Departamento del Tesoro promulgadas desde el 11 de julio y el anuncio del Departamento, el 30 de noviembre, de restricciones de visa a nueve funcionarios cubanos.
Estados Unidos continúa utilizando todas las herramientas diplomáticas y económicas apropiadas para presionar por la liberación de los presos políticos y apoyar el llamado del pueblo cubano a una mayor libertad y rendición de cuentas.
Fue un editorial que refleja los puntos de vista del gobierno de Estados Unidos.