A continuación, un editorial que refleja opiniones del gobierno de Estados Unidos.
La administración Biden-Harris está decidida a ampliar las vías legales para la migración a Estados Unidos y evitar que las personas emprendan el peligroso viaje hacia la frontera.
El secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario del Departamento de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, describieron recientemente una serie de medidas en respaldo de este objetivo.
Uno de ellos es el establecimiento de Centros Regionales de Procesamiento en ubicaciones seleccionadas. Los primeros centros de este tipo se abrirán en Colombia y Guatemala. El secretario Blinken elogió a ambos países calificándolos de “excelentes socios”:
“Estos centros serán operados por socios de organizaciones internacionales y mejorarán el acceso de las personas calificadas al procesamiento acelerado de reasentamiento de refugiados, la reunificación familiar y las vías laborales en Estados Unidos. También serán un punto de referencia para las vías legales, así como para la protección humanitaria y de refugiados en otros países, como Canadá y España”.
El secretario de Seguridad Nacional, Mayorkas, señaló que otra forma de ampliar las vías legales es agilizar los procesos de libertad condicional de reunificación familiar establecidos desde hace mucho tiempo para cubanos y haitianos para que las personas de estos países con peticiones familiares aprobadas puedan reunirse más rápidamente con sus seres queridos en Estados Unidos.
“Tercero, he ordenado a mi equipo que desarrolle procesos de reunificación familiar que extenderán este reconocido modelo a ciertas personas de El Salvador, Guatemala, Honduras y Colombia.”
En cuarto lugar, a través de la exitosa aplicación móvil CBP One, las personas podrán programar más citas en los puertos de entrada. “Continuarán los procesos de ingreso condicional para Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, así como las correspondientes deportaciones a México de quienes no tengan base legal para quedarse”, dijo Mayorkas. “Al mismo tiempo, estamos aplicando medidas a quienes no utilicen nuestras vías legales”.
Esas medidas incluyen una prohibición de cinco años de admisión a EEUU y la posibilidad de enjuiciamiento penal por cualquier intento posterior de cruzar la frontera ilegalmente.
“Permítanme ser claro”, dijo el secretario de Seguridad Nacional Mayorcas, “nuestra frontera no está abierta”.
El enfoque de la administración Biden-Harris está “centrado en hacer que las migraciones sean más seguras, ordenadas y humanas, y en promover los intereses del pueblo estadounidense”, declaró el secretario de Estado Blinken.
También subrayó la importancia de trabajar con nuestros socios regionales. Hay una “misión al centro del reto de la migración”, dijo el secretario Blinken. ¿Cómo podemos trabajar todos juntos, tal como estamos, para sentar las bases de un futuro mejor, más seguro y más esperanzador para todos nuestros ciudadanos?”
Fue un editorial que refleja puntos de vista del gobierno de Estados Unidos.