A continuación, un editorial que refleja opiniones del gobierno de Estados Unidos.
Estados Unidos continúa solidarizado con el pueblo de Haití, ya que muchos haitianos han perdido a sus seres queridos en las recientes inundaciones, un terremoto, y la espiral de violencia.
“La situación de seguridad en Haití sigue siendo una gran preocupación”, dijo el embajador Jeffrey DeLaurentis, representante adjunto interino de EEUU ante Naciones Unidas.
“El Panel de Expertos en Sanciones de la ONU reportó mayores niveles de violencia armada e invasión de pandillas en nuevos territorios. La influencia de las pandillas ahora se extiende al 80 por ciento de Puerto Príncipe, y cada vez más allá de la capital. El uso deliberado de la violencia de género, especialmente la violación y otras formas de violencia sexual, es una táctica horrorosa”.
“Estados Unidos condena enérgicamente este uso sistemático de violencia sexual”, dijo el embajador DeLaurentis.
“La violencia sexual relacionada al conflicto en Haití continúa alimentando más violencia, induce al desplazamiento y frecuentemente ocurre junto a otros abusos contra civiles.
Los sobrevivientes no tienen acceso a servicios de apoyo y corren el riesgo de sufrir represalias por denunciar los abusos. La violencia desenfrenada de las pandillas también ha reducido el acceso a los medios de subsistencia, servicios de atención médica, impide que los niños vayan a la escuela y crea una emergencia de seguridad alimentaria”.
Estados Unidos ha proporcionado más de 110 millones en ayuda humanitaria para Haití este año y continuará trabajando en estrecha colaboración con organizaciones asociadas para satisfacer las necesidades urgentes. Pero sin seguridad mejorada, la situación humanitaria en Haití seguirá deteriorándose, dijo el Embajador DeLaurentis.
El flujo ilícito de armas de fuego facilita que las pandillas lleven a cabo sus crímenes y acumulen armas superiores en capacidad a las de la Policía Nacional de Haití. En respuesta, para mejorar el intercambio de información entre los países de la región y apoyar el enjuiciamiento de los traficantes, el Departamento de Justicia de Estados Unidos creó la posición de Coordinador de Enjuiciamientos de Armas de Fuego del Caribe.
Estados Unidos también estableció una Unidad de Investigación Criminal Transnacional de Haití en colaboración con la Policía Nacional de Haití para facilitar la investigación y el enjuiciamiento de crímenes, en particular los relacionados a armas de fuego y tráfico humano.
Estados Unidos continúa trabajando con un número creciente de socios internacionales para apoyar la seguridad en Haití. Por tales razones, Estados Unidos respalda el emplazamiento de una fuerza multinacional en Haití para ayudar a su policía a restablecer la seguridad.
El Embajador DeLaurentis exhortó al Consejo de Seguridad a hacer su parte para ayudar a Haití, promoviendo sanciones adicionales contra quienes financien y fomenten la violencia y la inestabilidad.
Fue un editorial que refleja puntos de vista del gobierno de Estados Unidos.