Este editorial refleja las opiniones del gobierno de Estados Unidos.
Estados Unidos, el principal destino de migrantes en el hemisferio occidental, ha estado experimentando un aumento en el número de migrantes irregulares.
Aquellos que ingresan al país sin pasar por puertos de entrada legales. Para ayudar a aliviar los problemas asociados con una afluencia tan enorme de personas, Estados Unidos está tomando una serie de medidas para impedir que se eluda la entrada legal, al tiempo que amplía las opciones de vías legales.
“También hemos simplificado y aumentado significativamente nuestra capacidad para utilizar la deportación acelerada”, dijo Blas Núñez-Nieto, subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración del Departamento de Seguridad del Territorio Nacional de Estados Unidos. Esto resulta en “consecuencias rápidas para los individuos que no establecen una base legal para permanecer en Estados Unidos”.
“Es importante señalar que a medida que fortalecemos esas consecuencias, hemos demostrado nuestro compromiso de brindar opciones legales para quienes vienen. Eso incluye nuestra aplicación móvil CBP One, Aduanas y Patrulla Fronteriza, en la frontera, que ha permitido a cientos de miles de personas programar citas seguras y ordenadas para presentarse en un puerto de entrada. Incluye algunos de nuestros programas de parole humanitario, incluyendo nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, que han demostrado ser efectivos para canalizar algunos de esos flujos hacia medios legales, seguros y ordenados”.
“El gobierno de Estados Unidos está comprometido en un esfuerzo integral a largo plazo para hacerle frente a los retos de la migración irregular y el desplazamiento en el hemisferio occidental”, dijo el subsecretario adjunto para Centroamérica, Cuba y Migración del Departamento de Estado, Eric Jacobstein.
“A finales del año pasado, el presidente Biden anunció casi 485 millones de dólares en ayuda humanitaria adicional para responder a las necesidades de los refugiados, migrantes y otras poblaciones vulnerables”.
“La idea es fomentar el reparto de responsabilidades que hagan frente a los retos migratorios regionales, proporcionar ayuda para la estabilidad a las comunidades afectadas, ampliar las vías legales y promover políticas migratorias humanas, enfrentando esencialmente la causa fundamental de estos problemas antes de que las personas migren.
Además, “Nuestras Oficinas de Movilidad Segura en la región facilitan el procesamiento expedito de refugiados a través del Programa de Admisión de Refugiados de EEUU y brindan referencias de información sobre libertad condicional humanitaria, reunificación familiar y programas laborales”, dijo el subsecretario adjunto Jacobstein.
"Nuestro mensaje es claro. Aproveche los caminos legales y no haga un viaje peligroso hacia el norte, donde continuaremos custodiando nuestra frontera con firmeza".
Fue un editorial que refleja opiniones del gobierno de Estados Unidos.