A continuación un editorial que refleja opiniones del gobierno de Estados Unidos.
Altos funcionarios de Estados Unidos, México y Guatemala se reunieron recientemente en Washington para su primera conferencia ministerial trilateral sobre migración.
El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo que los tres países quieren “redoblar la colaboración que tenemos para hacerle frente a los flujos migratorios”.
“En todo el mundo, hay más personas en movimiento que en cualquier otro momento de la historia registrada, y lo mismo ocurre, por supuesto, en nuestro propio hemisferio. Tenemos un compromiso compartido por una migración segura, ordenada y humana, y queremos asegurarnos de que el trabajo que estamos haciendo continúe avanzando en esa dirección”.
Los tres países, indicó, reconocen la importancia de centrarse en las causas fundamentales.
“Las personas deberían tener derecho a permanecer en sus propios países, pero eso significa que tienen que existir las condiciones que realmente hagan no sólo posible sino atractivo para ellos permanecer. La conclusión para muchas personas en todo el mundo es que, si no puedes poner comida en la mesa para tus hijos, intentarás lo necesario para lograrlo. Por lo tanto, crear esas oportunidades es parte fundamental del proceso de hacerle frente a este reto”.
El secretario Blinken destacó el importante esfuerzo liderado por la vicepresidenta Kamala Harris en su Iniciativa Centroamérica Hacia Adelante, que ha promovido $4.200 millones en nuevas inversiones del sector privado en el norte de Centroamérica. "Ya hemos visto resultados", dijo el secretario Blinken, "y esos resultados se están traduciendo en nuevas oportunidades para las personas en sus países".
Enfrentar las causas profundas de la migración irregular significa más que crear buenos empleos. Significa apoyar la gobernabilidad democrática, proteger los derechos humanos y mejorar la seguridad para ayudar a las personas a construir una vida mejor en sus países.
En una declaración conjunta posterior a la reunión, las tres delegaciones también se comprometieron a ampliar las vías legales de migración, así como defender los estándares internacionales de protección y derechos humanos para garantizar la dignidad y el bienestar de los migrantes. Los tres países decidieron compartir datos sobre los flujos migratorios mediante el lanzamiento de un nuevo panel y establecerán un grupo de trabajo trilateral para mejorar la seguridad, los procesos de aplicación de la ley y la infraestructura a lo largo de sus fronteras internacionales.
“En todas estas áreas, nuestros países están trabajando juntos”, dijo el secretario Blinken, “porque ningún país puede enfrentar este desafío de manera efectiva por sí solo”.
Fue un editorial que refleja opiniones del gobierno de Estados Unidos.